Quien vaya a disfrutar del Parque de Atracciones de Madrid, encontrará muchas posibilidades de diversión, sorpresa, alegría…. El otro día hablaba con unos amigos para quienes “El aserradero” es una de sus mejores atracciones. Es una montaña rusa de agua con canoas que dis
curren a través de un canal con ‘dos geniales’ caídas, pero donde algunos -decían- se ponen el chubasquero para no verse salpicados por ‘cuatro’ gotas de agua controlada.
Y este viajero se acordó de las potentes cataratas de Iguazu (Brasil).
¡Qué maravilla recibir, al final del paseo -a sus pies- a los pies de la más imponente catarata nunca vista, las aguas casi gaseosas, frías, casi ventisca, monumentalmente ruidosas, que deja su cola al caer por el terrible desnivel que ella misma, con el paso de los años, se ha fabricado!.
¡Qué maravilla percibir desde allí ese ruido casi infernal!
¡Qué maravilla encontrarse en medio de una nube de agua casi celeste!
¡Qué chubasquero, ni qué niño muerto!.
Cuando alguien se enfrenta a la naturaleza, o disfruta de su ímpetu, o se queda en “el aserradero” de su particular parque de atracciones y coloca ese salvador chubasquero.

Y este viajero se acordó de las potentes cataratas de Iguazu (Brasil).
¡Qué maravilla recibir, al final del paseo -a sus pies- a los pies de la más imponente catarata nunca vista, las aguas casi gaseosas, frías, casi ventisca, monumentalmente ruidosas, que deja su cola al caer por el terrible desnivel que ella misma, con el paso de los años, se ha fabricado!.
¡Qué maravilla percibir desde allí ese ruido casi infernal!
¡Qué maravilla encontrarse en medio de una nube de agua casi celeste!
¡Qué chubasquero, ni qué niño muerto!.
Cuando alguien se enfrenta a la naturaleza, o disfruta de su ímpetu, o se queda en “el aserradero” de su particular parque de atracciones y coloca ese salvador chubasquero.
No hay término intermedio.
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ResponderEliminarPues si, tiene que ser maravilloso.
ResponderEliminarUn besote Blas.
Dejarse llevar por la intensidad de la sensación...Yo recuerdo un momento así en medio de una ventisca.Me sentí más viva que nunca!
ResponderEliminarBesos
Me ha costado, primo, dos whiskys me ha costado, pero ¡Aquí está! y no podía titularse de otra forma: El chubasquero.
ResponderEliminarCreo que algo me ha fallado en la anterior búsqueda, de todas formas... razón no suele faltarle a él, al que escribe.
Besis