22 de marzo de 2014

El ‘kuomboka’ zambiano


Al fondo, allá donde se pone el sol [fotografía], se encontraba Lealui, una de las capitales del pueblo ‘lozi’ [la foto está tomada desde Mongu, actual capital de la provincia del Oeste, Zambia, a unos 15 kilómetros]. 
El viajero insatisfecho va a contar un poco de historia de esta zona, que se mezcla con la actividad festiva y las actuales celebraciones tradicionales.
Este pueblo ‘lozi’, con su ‘reyezuelo’ incluido, ocupa la región semiautónoma de Barotseland. Si bien, este ‘reyezuelo’ tiene en la actualidad nulo poder político en Zambia si lo tiene en la tradición local. Los ‘lozi’ tienen dos capitales: la otra es Limulunga, capital durante la estación lluviosa. El traslado anual de Lealui (inundada o a punto de inundarse) a Limulunga es un acontecimiento de gran importancia, celebrado como uno de los más conocidos festivales de Zambia, el ‘Kuomboka’.
La vasta llanura de Lealui (que se aprecia en la fotografía) y la abundancia de peces en la región fueron ideales para el asentamiento de los ‘lozi’, pero las lluvias y las posteriores inundaciones hacían imposible mantenerse allí. Nació así la costumbre de trasladarse periódicamente a unas tierras más seguras hasta la llegada de la estación seca. Durante el ritual, que aún se mantiene, se acompaña la partida del rey y de su pueblo de la capital del reino, Lealui, hacia Limulunga, ciudad situada al abrigo de las inundaciones provocadas por la crecida de aguas del Zambeze. Cantos y ritmos africanos están presentes durante todo el recorrido. Con la llegada de la familia real y su séquito al destino comienzan allí los festejos con cantos y bailes de la tradición ‘lozi’.
Todo este conglomerado de actividades forma el ‘Kuomboka’ zambiano.
Para presenciar este ritual, uno de los acontecimientos más antiguos del país, era necesario estar por la zona en el mes de abril, cuando se celebraba. Este mochilero estuvo en el mes de enero. Conoció, eso sí, Limulunga, un poblado africano más, con varias casas pintadas de rojo por Airtel y sin especial atractivo. No puedo visitar su palacio real (fabricado con esteras, juncos y barro, según pudo saber) pues estaba prohibido.
No pudo visitar Lealui por cuestiones logísticas. Se tuvo que conformar con presenciar esta puesta de sol desde la actual Mongu.


Copyright © By Blas F.Tomé 2014

5 comentarios:

  1. Para no haber podido ver o visitar "casi nada" de la zona nos traes un recuerdo espléndido de eso que es, o era, Africa, antes de la creación de las fronteras postcoloniales.

    Gracias y saludos.

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  2. Vamos a ver, quizas pueda dejarte un pequeno comentario con el permiso de este"indignado de PC". Se harto de la explotacion!
    Me ha encantado esa historia de capitales de secano y lluvias. De todas las maneras no es nada sorprendente, los reyes de la "cristiandad cristiana" tambien tras ladaban su capital,por razones politicas... no de lluvias (al menos mas predecible!).

    Todos esos "reyezuelos", como dices, son igualitos que nuestros mas preclaros nobles que se niegan a renunciar a sus privilegios.
    Besos

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  3. Una gran visita guiada...parece que hayamos estado allí !

    Un cordial saludo
    Mark de Zabaleta

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  4. Curioso el ritual del traslado de capital por la estación de lluvias. Cualquier pretexto es bueno para organizar una festividad en todos los lugares del mundo, y nosotros somos espectadores interesados. Cuándo acabarán las épocas de los reyezuelos???

    Esta vez nos ilustras tu texto con pocas imágenes. Aunque no pudieras visitar el palacio me hubiera gustado curiosear el interior de la grocery.
    Besos (desde mi África evocada) en un día lluvioso.

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  5. Pues creo que con la puesta de sol uno ya es capaz de disfrutar de la belleza natural.¡¡Qué maravilla!!
    Un abrazo, Blas.

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